Está acusado de los cargos de asociación delictuosa, narcotráfico y lavado de dinero producto del tráfico de estupefancientes.
Arellano Félix, uno de los hermanos del clan fundador de esta poderosa organización narcotraficante, fue extraditado por México a Estados Unidos el viernes pasado para enfrentar cargos de narcotráfico y lavado de dinero.
De 55 años y apodado "El Doctor", Arellano Félix compareció ante la jueza Barbara Major vestido con el uniforme naranja de prisionero y entre fuertes medidas de seguridad.
La fiscal Laura Duffy calificó su extradición como "un hito en nuestra lucha contra los carteles narcotraficantes mexicanos".
La jueza fijó para el viernes otra audiencia sobre sus condiciones de detención, luego de que el fiscal Joseph Green afirmara que el acusado es peligroso para la comunidad y existe el riesgo de que escape.
Si es hallado culpable, Arellano Félix enfrenta hasta 140 años de prisión, según los fiscales.
El acusado fue arrestado tras un intercambio de disparos con las autoridades mexicanas en Tijuana en octubre de 2008. En ese momento se desempeñaba como el número dos del cártel de los Arellano Félix o de Tijuana, llamado así porque opera mayormente en esa ciudad fronteriza con San Diego.
En 2010 se ordenó su extradición a Estados Unidos, pero apeló en varias instancias sin éxito. Finalmente llegó el 31 de agosto a San Diego.
"La extradición de Eduardo Arellano Félix marca el fin de una investigación de la DEA de 20 años de duración contra este sanguinario cártel", dijo entonces el agente especial en funciones de la administración antidrogas estadounidense en San Diego, William Sherman.