Resultado de operativos y labores de inteligencia de Ejército, Marina y PF, el gobierno estableció la media filiación de esos capos para relanzar la campaña que invita a la población a denunciarlos.México.- Desde hace dos meses, la Procuraduría General de la República tiene en su poder información relevante que contribuirá a enfrentar y desarticular a las organizaciones criminales que operan en el país.
Lo anterior gracias a las labores de inteligencia de las secretarías de la Defensa Nacional, Marina y la Policía Federal.
Durante las últimas incursiones de las fuerzas del orden en estados como Baja California, Tamaulipas, Nuevo León, Michoacán y Sinaloa, por mencionar algunos, se lograron “conocer” a los principales operadores de los cárteles del narcotráfico, cuya media filiación hasta hace meses era un misterio.
Dichas personas son responsables de la ola de violencia que azota el norte y centro del país.
Es por eso que la PGR decidió relanzar la campaña de recompensas, cuyo fondo de 2009 a la fecha asciende a más de mil millones de pesos, para ubicar a casi 100 personas acusadas de delitos de delincuencia organizada, contra la salud y homicidio.
Dicha acción ha marcado un precedente, pues ninguna administración anterior a la de Felipe Calderón había destinado una cantidad millonaria para invitar a la población a denunciar a estas personas.
Es así como hoy el gobierno federal conoce a los principales responsables de la ola de violencia.
Derivado de esas operaciones del Ejército y de la Policía Federal se ha podido identificar el verdadero rostro de Juan Pablo Ledezma o José Luis Fratello o Luis Ledesma, El JL, principal lugarteniente del capo Vicente Carrillo Fuentes, El Viceroy, líder del cártel de Juárez, por quien se ofrecen 15 millones de pesos.
Sobre El JL, señala la PGR, hay versiones de que está muerto, sin embargo eso no se ha podido comprobar su deceso, pero presumen que puede tratarse de una maniobra de distracción por parte del crimen organizado.
Este hombre es el segundo en grado de importancia, después de El Viceroy, además de que es el encargado de la plaza de Chihuahua y maneja los grupos de choque conocidos como Cóndor yLinces, este último conformado por ex policías y ex militares, involucrados en todas las actividades delictivas.
También se conoce el rostro del principal líder de La Línea, brazo armado del cártel de Juárez: Juan Pablo Guijarro Fragoza y/o Fragozo, El Mónico o El H1.
Se sabe que tiene el encargo de defender la capital de Chihuahua del grupo criminal denominadoGente Nueva, creado por el cártel de Sinaloa que encabeza Joaquín El Chapo Guzmán.
Entre sus funciones está surtir y realizar cobros por droga en tienditas a narcomenudistas, en antros y centros de prostitución. Por él existe una recompensa de 15 millones de pesos.
Asimismo, la PGR cuenta con la media filiación de José Antonio Acosta Hernández, El Diego oBlablazo, ex agente del Grupo Antisecuestros de la Policía Ministerial de Chihuahua y autor intelectual de la matanza de 15 estudiantes que se encontraban en una fiesta en la colonia Villas de Salvarcar, en Ciudad Juárez, en enero del año pasado.
Por él se también se pagan 15 millones de pesos; se sabe que trabaja bajo las órdenes de Emilio Ramírez Castillo, El Negro.
Mientras que en Tamaulipas, las Fuerzas Armadas obtuvieron datos sobre Sergio Ricardo Basurto Peña, El Grande, integrante del cártel de Los Zetas, responsable de controlar las narcotiendas en Nuevo Laredo, además de que participa en ejecuciones.
Este delincuente, por quien se ofrecen 10 millones de pesos, opera también en Coatzacoalcos, Veracruz, sitio que está bajo control de la mencionada organización criminal.
Pero uno de los principales objetivos de los soldados y marinos es Maxiley Barahona Nadales, El Contador, El 19, El Maxiley o El Max, identificado como uno de Los Zetas más peligrosos, y por el que hay una recompensa de 10 millones.
Actualmente funge como el encargado de la plaza de Veracruz, Tabasco y Chiapas; bajo sus órdenes se han cometido diversos homicidios y secuestros, así como la detonación de granadas de fragmentación en la Procuraduría General de Justicia de Chiapas.
Otros delincuentes de importancia y por quienes se paga 10 millones de pesos, son dos integrantes del cártel de La Familia: Ignacio Rentería Andrade, El Nacho o El Cenizo, a quien su ubica como operador y jefe de la plaza de Uruapan, con influencia también en Apatzingán.
Y Samer José Servín Juárez, quien controla Morelia, Michoacán; igualmente Querétaro y la ciudad de Reynosa. Tamaulipas. Es considerado uno de los principales operadores del extinto capo de ese cártel, Nazario Moreno González, El Chayo, ya que es el líder financiero y lavador de dinero.
De igual manera, la PGR decidió dar difusión del rostro del ex candidato a diputado federal por el PVEM Saúl Solís Solís, El Lince, encargado de controlar las plazas del Estado de México y el Distrito Federal.
Se cree que es el contacto con las autoridades de seguridad pública y procuración de justicia, así como presidentes municipales, es por ello que su recompensa es más alta: 15 millones de pesos. Esta persona opera en Ario de Rosales, Tacámbaro y Turicato, Michoacán.
