MIL CINCUENTA: Desmantelan en Arizona red ligada a cártel de Sinaloa

 El sheriff del condado de Pinal, Paul Babeu, informa sobre el operativo contra narcotraficantes en Arizona. REUTERSPHOENIX, ESTADOS UNIDOS (31/OCT/2011).- Una red de narcotraficantes ligada al cártel mexicano de Sinaloa, que traficaba 33 millones de dólares en droga mensualmente a través del desierto de Arizona, fue desmantelada, informaron hoy las autoridades que participaron en la investigación.

El anuncio en Phoenix concluyó con 17 meses de investigaciones que derivaron en tres "acciones judiciales de gran escala" ligadas al caso, según la Autoridad de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos, la Oficina del Fiscal General de Arizona y el departamento del sheriff del condado de Pinal.


El golpe es considerado como uno de los más grandes en la historia en Arizona.


Un total de 76 sospechosos, entre ciudadanos mexicanos y estadounidenses, fueron arrestados en redadas desde mediados de septiembre en el sur y el centro de Arizona, dijeron las autoridades.


Los arrestados en la denominada Operación ''Pipeline Express'' van desde "jefes" de la organización a guardias de "casas de seguridad", exploradores y conductores, señalaron.


Durante las redadas realizadas la semana pasada, las autoridades confiscaron más de dos toneladas de mariguana, 19 armas y casi 200 mil dólares en efectivo.


Datos de inteligencia recolectados como parte de la "Operation Pipeline Express" revelaron que la red de narcotráfico estaba vinculada con el cártel mexicano de Sinaloa y funcionaba desde hacía al menos cinco años.


Las autoridades estiman que durante ese tiempo la red contrabandeó más de 1.5 millones de kilos de mariguana, más de nueve mil kilos de cocaína y unos cuatro mil 500 kilos de heroína en Estados Unidos. Las ganancias ilícitas generadas por ese comercio fueron calculadas en casi dos mil millones de dólares.


Monopolio virtual sobre rutas


Las autoridades dijeron que la red se benefició al obtener un monopolio virtual sobre las rutas de contrabando a lo largo de un tramo de unos 130 kilómetros del desierto en el suroeste de Arizona.


Los traficantes, que operaban desde células con sede en las ciudades de Chandler, Stanfield y Maricopa, transportaban narcóticos a pie y en vehículos desde la frontera a una red de casas de seguridad en el área de Phoenix, donde la droga era vendida a distribuidores de otros estados.


"Hemos asestado un importante golpe a una empresa criminal mexicana que ha sido responsable del envenenamiento de nuestras comunidades", dijo el fiscal general de Arizona, Tom Horne. "Me parece totalmente inaceptable que los barrios de Arizona sean tratados como campo de negociación de drogas".


El cártel tiene su sede en el estado de Sinaloa en la costa del Pacífico, zona donde hay grandes plantaciones de marihuana y amapola, considerada la cuna del narcotráfico mexicano desde la década de 1960.


El cártel maneja alrededor del 65% de las drogas transportadas ilegalmente a Estados Unidos, según expertos.


Decenas de miles de personas han muerto por la violencia relacionada al narcotráfico desde que Felipe Calderón lanzó su campaña militar contra los cárteles luego de asumir la Presidencia de México a fines del 2006.